jueves, 31 de marzo de 2011

La libertad de optar del Hombre –especie- no le otorga libertad para definir las opciones a optar, sino que estas son definidas por factores externos a su Voluntad y con antelación al acto de optar, por lo que tal libertad es sólo relativa.

Fuente: http://rafaelrobles.com/wiki/index.php?title=Archivo:Libertad.JPG

Los hombres se equivocan, en cuanto que piensan que son libres; y esta opinión sólo consiste en que son conscientes de sus acciones e ignorantes de las causas por las que son determinados. Su idea de la libertad es, pues, ésta: que no conocen causa alguna de sus acciones.

Spinoza


¿Cuál es la libertad que posee el Hombre –especie? Sólo aquella que le confieren las circunstancias a manera de opciones. Tal libertad es similar a la de un votante en un proceso electoral. ¿Puede realmente, el votante escoger al candidato de su preferencia? La respuesta es un quizás. Para que tal posibilidad ocurra, tal candidato tendría que estar en la boleta de opciones. Pero es claro que el votante no define que candidatos estarán en la boleta, sino que estos son escogidos a través de procesos electorales anteriores, donde participan muchos otros votantes con preferencias disímiles. Una vez definida la boleta de opciones, el votante sólo podrá votar a uno de los candidatos disponibles para ser votados, aun cuando ninguno de estos, incluyendo el voto en blanco o nulo, resultase ser el candidato de su preferencia o que más de uno lo sea. Así, la libertad para escoger un candidato Y1 del votante X1, está siendo relativizada a las libertades para escoger un candidato Y1,2,3… n de los votantes X1,2,3n y a las rigurosidades reglamentarias del proceso.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Siempre que un hombre pueda escoger entre dos o más opciones, se inclinará por aquella que maximice su bienestar.

Fuente: Sabe Tudo


Usted no lo entiende. Lennon, el profeta, me dijo: “Charlie, levántate; ¡degüella a esos cerdos que se lo pasan bomba en sus mansiones de Hollywood! Los tiempos han llegado. ¡Tú eres el Hijo del Hombre y el Ángel Exterminador...!
Charles Manson

 

Ciertamente, existe un estado ideal donde el bienestar se maximiza plenamente. Un lar sin escasez, donde  toda necesidad es plenamente satisfecha y la integridad no puede ser vulnerada ni por la enfermedad ni por la muerte. Queda así el alma en sosiego continuo, y la Voluntad, sin el compromiso de accionar, libre de las ataduras del deseo y del miedo. Tristemente, no es ese el estado ordinario en el que el Hombre –especie- nace, crece, se desarrolla y muere. En este estado ordinario, las necesidades se encuentran frecuentemente insatisfechas y la integridad en permanente riesgo. Es este estado, de continua insatisfacción y permanente inseguridad, inducción de la Voluntad. El Hombre –especie- satisfecho tiende, irremisiblemente, al reposo. Es la insatisfacción, la necesidad,  la sensación de vacío, lo que impulsa al Hombre –especie- al movimiento. El hambre incesante clama alimentos, la eterna sed clama por agua. Sus clamores subyugan la Voluntad, la someten a la elección, comer y beber o sufrir y morir.
Es claro que no todas las disyuntivas de la existencia humana son tan obvias como las anteriores. Por lo general, las decisiones o escogencias del Hombre –especie- están envueltas en un halo de incertidumbre sobre los resultados. Y en los momentos más oscuros de la vida del Hombre –especie-, las disyuntivas se plantean entre sufrimientos y latrocinios tan terribles y mortales, que toda decisión resulta en acciones penosas e incomprensibles.
A pesar de esto, podemos concluir que, en cada una de sus acciones, sin importar las disyuntivas, el Hombre –especie- busca maximizar su bienestar, y que dada dos o más opciones, escogerá aquella que, de acuerdo a su discernimiento, le represente un mayor placer o un menor dolor.

martes, 15 de marzo de 2011

El dolor y la muerte se producen cuando una o más necesidades se encuentran insatisfechas, o la integridad individual (cuerpo-alma-mente) es vulnerada.

 

Sólo temo una cosa: no ser digno de mis sufrimientos.
Fedor Dostoievski

Aquí también nos apartaremos de las conceptualizaciones metafísicas, y estableceremos el dolor como la antitesis del placer. El clamor de la necesidad insatisfecha, de la integridad vulnerada; un hambre que no come; una sed que no bebe; el grito del hueso fracturado; el envejecimiento que clama muerte. No hay en él negatividad ni aferramiento sino una fría imparcialidad. La impotencia de llenar el vacío, de cesar la enfermedad.

El dolor, como el placer, trasciende las consideraciones subjetivas, aun cuando es específico en  cada Hombre –especie-, y surge de manera objetiva, como resultado concreto de procesos (carnales-espirituales-mentales)  concretos que sólo culminan en la muerte.

lunes, 14 de marzo de 2011

El placer se produce cuando una o mas necesidades son satisfechas. Las necesidades pueden ser carnales, espirituales, y mentales o del intelecto.

Fuente: No Dibujo Nada

Cuando la necesidad nos arranca palabras sinceras, cae la máscara y aparece el rostro.

Lucrecio


Esta apreciación del placer nos aparta de las discusiones filosóficas, metafísicas o éticas y nos aproxima a la definición Biológica  del bienestar.


El objeto es ubicar el placer en un contexto neutral, aun cuando es necesario admitir, dada la apreciación de bienestar anteriormente expuesta, que el Hombre –especie- en tanto individuo, posee una única y particular estima de las necesidades, similar a las de sus semejantes pero jamás idéntica. Y siendo que la necesidad es un sentido de carencia que clama por ser satisfecho, un hambre que clama por alimento, una sed que clama por agua, una curiosidad que clama por conocimiento, queda claro, entonces, que tal satisfacción que conduce a tal placer, que no es otra cosa que el enmudecimiento de tal clamor, es único y particular de cada Hombre –especie-.

domingo, 13 de marzo de 2011

El bienestar del Hombre –especie-, se encuentra cerca de todo aquello que le produce placer y lejos de todo aquello que le produce dolor y muerte.






 En una ocasión un joven rico vino a Jesús y le dijo: Maestro bueno, ¿Qué puedo hacer para tener la vida eterna? Jesús le respondió: ¿Qué me hablas de bueno?  Ninguno hay bueno, sino uno: Dios.
El Evangelio según Mateo 19:16-30

Como se verá más adelante, esta apreciación del bienestar no pretende hacer una apología del hedonismo epicúreo o cirenaico, ni profanar el eudemonismo espiritual o el idealismo platónico. El objeto es la delimitación del bienestar entre las viejas fronteras del empirismo de Bentham, sin caer en las divagaciones conceptuales sobre lo que es o no es placentero, ni en disertaciones morales sobre las acciones convenientes. Así se establece que el Hombre –especie-, en tanto individuo, posee una única y particular apreciación del bienestar, similar a las de sus semejantes pero jamás idéntica, por lo que su maximización no puede colectivizarse o distribuirse como un bien utilitario. Esto es, porque: i) El bien del uno puede ser el bien del otro; ii) el bien del uno puede no ser el bien del otro; y iii) el bien del uno puede ser el mal del otro.

lunes, 7 de marzo de 2011

Lo que el Hombre –especie- quiere o desea está determinado por las inclinaciones de su mente, en cambio lo que puede está restringido a los límites de su propia naturaleza, factor externo a su Voluntad.

Fuente: Fotolog




Mi razonamiento quiere ser fiel a la evidencia que lo ha despertado. Esa evidencia es lo absurdo. Es el divorcio entre el espíritu que desea y el mundo que decepciona, mi nostalgia de unidad, el universo disperso y la contradicción que los encadena.
Albert Camus



En el Hombre –especie-, el Querer no está limitado por el Poder para ejercer el Querer o la Voluntad, sino que se encuentra libre de toda limitación de la Voluntad, y totalmente controlado por esta. No ocurre igual con lo que el Hombre –especie- Puede, la capacidad para ejercer el Querer o la Voluntad como cosa en sí. 

Son las limitaciones naturales de la condición humana las que determinan lo que el Hombre –especie- Puede. Y dada que esta condición humana no es determinada ni controlada por el humano mismo, por ser sustancia de todo aquello que lo define como Hombre –especie-, podemos establecer que sus limitaciones naturales son un factor externo a su Voluntad.

sábado, 5 de marzo de 2011

Dado que el Hombre –especie- no determina el Conocimiento de lo que Puede en cada momento dado, este se considera un factor externo a su Voluntad

Fuente: Lope de Vega clásico






“Si ya sabía que no sabía, por qué indujo a Platón a escribir tantas tonterías”

Interpelación de un Estudiante de filosofía del siglo XX al personaje Platónico “Sócrates”.
Puesto que el Hombre –especie- no dispone a voluntad del Conocimiento de  lo que Puede, sino que este se construye y aglomera, y se hace disponible en función de los esfuerzos de muchos, y de elementos azarosos generadores de constantes incertidumbres sobre los resultados a obtener de esos esfuerzos de muchos, el Conocimiento de lo que Puede escapa a los rigores de su Voluntad. Y aun  cuando depende de ella (la voluntad del Hombre –especie-), para gestarse y hacerse aprovechable, su disponibilidad (la del Conocimiento de lo que se Puede), escapa a los deseos del Hombre –especie-. Esto es, que el Hombre –especie- no determina qué sabe y cuándo lo sabe, sino que es determinado, por el azar respectivo y la disponibilidad del Conocimiento de lo que se Puede en un momento dado de la historia de una sociedad o nación dada.

viernes, 4 de marzo de 2011

El accionar del Hombre –especie- está determinado por lo que Puede y por el Conocimiento de lo que Puede.





Me han dicho que la vida termina en muerte, pero ninguno muerto ha venido a confirmarme lo que se afirma.
Sé o no sé, he ahí la cuestión.

El camino que conduce al conocimiento de las cosas del Universo es el camino del azar. El Hombre –especie-, se cuestiona incesantemente sobre los misterios de la naturaleza, pero no obtiene respuestas a voluntad, sino que estas se rebelan de manera esquiva. Muchas son las cosas que, sin dudas, Puede el Hombre –especie-, pero su corto conocimiento de estas lo limita en su accionar, que es lo mismo que decir: “Lo limita en lo que Puede”. 

En un principio el Hombre –especie-  no sabía lo que podía. Siempre pudo surcar la mar o danzar sobre la Luna. Siempre pudo curar la lepra o quemar Hiroshima, pero no lo sabía, no podía saberlo, porque tales conocimientos aun no se revelaban. Hoy no lo sabe, pero quizás llegue a deambular hoyos negros o bailar con una supernova de fondo.

jueves, 3 de marzo de 2011

El Hombre -especie-, hace lo que Quiere si Puede

 
Saddam Hussein y Muamar el Gadafi (1979, Bagdad),
algunas semanas antes de la renuncia del presidente iraquí,
Ahmed Hassan al-Bakr.  Fuente: Frontline


“Nada existe de cuya naturaleza no se siga algún efecto”.
Baruch Spinoza




Ciertamente, más de uno habrá soñado con viajar a las estrellas, deambular hoyos negros, o disfrutar en primera fila el espectáculo de una supernova. Habrá quienes deseen volar libres y poéticos cual águilas señoriales por los cielos del norte, fuera de todo alcance. Es muy posible, incluso, que personas menos extrañas sueñen con cosas más terrenales.
De hecho, y aunque parezca inverosímil, muchos se esforzarán hasta el agotamiento, día tras día, por hacer realidad sueños tan recurridos como tener una casa o un auto familiar, o sencillamente viajar a Paris.  Muchos simplemente desean algo que comer.
Desafortunadamente, el Querer, como cosa en sí, sin el poder para ejercerse, es exiguo. Gran número de seres que se afligen en sus afanes de casas y autos  nunca verán materializar sus esfuerzos.  Muchos otros  morirán antes de probar bocado.
Queda claro, entonces, que Querer no es Poder, sino una simple inclinación de la mente. 

martes, 1 de marzo de 2011

El Hombre –especie- hace lo que Puede, no lo que Quiere.

Del Blog "Se equivocarme solo_JECEGO"



Nunca te he visto quejar, pero si te he visto rodar por la pendiente hacia algún lugar que no descifro.
La piedra en la vereda


Hagámonos una pregunta extrema y extraña: ¿Por qué se lanza un hombre desde un desfiladero? ¿Por qué quiere?

Es posible. Anualmente, miles de personas realizan este extremo y extraño acto, aunque no necesariamente desde un desfiladero. Es muy probable que muchos de ellos realicen este acto de manera voluntaria y consciente de las consecuencias. Sin embargo, no podemos evitar la posibilidad de que algunos se encuentren agobiados por la enfermedad o la confusión. El Querer, como tal, no es condición necesaria ni suficiente para explicar el acto. Después de todo, que alguno desee lanzarse al magma solar no significa que lo hará. También es posible que alguno que no lo desee termine lanzándose por un desfiladero como opción extrema frente a un mal que considere peor. La única respuesta objetiva a esta pregunta es porque Puede. Colocarse al borde de un desfiladero y lanzarse al… es una de las muchas cosas que un Hombre –especie- puede hacer con su vida, es una opción, no porque así Quiere, sino porque así Puede.